Quise subir la montaña.
Cuando descendí,
voltee para revisar mis pasos...
El camino se veía aún apetecible,
y retrocedí entonces,
para escudriñar aquello que me llamaba.
¡Oh loma!
¿Qué me quieres decir?
que cuando busco el regreso,
llevo a cuestas el filo de tu cuerpo.
Cuando descendí,
voltee para revisar mis pasos...
El camino se veía aún apetecible,
y retrocedí entonces,
para escudriñar aquello que me llamaba.
¡Oh loma!
¿Qué me quieres decir?
que cuando busco el regreso,
llevo a cuestas el filo de tu cuerpo.
Belial.
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